Conflicto en Oriente Próximo

Linternas, filtros de agua o anestesia no llegan a Gaza: las trabas de Israel a la ayuda humanitaria para el enclave

Naciones Unidas y varias organizaciones humanitarias internacionales denuncian que las autoridades israelíes se guían por criterios opacos para prohibir la entrada de ciertos suministros y hacen las inspecciones de camiones "más lentas, largas e inquisitivas"

Camiones con ayuda para Gaza, en el lado egipcio del paso de Rafah, el pasado día 23.

Camiones con ayuda para Gaza, en el lado egipcio del paso de Rafah, el pasado día 23. / EFE

Andrea López-Tomàs

Es una lista infinita. A menudo, aumenta. Otras veces, pocas, disminuye. La domina, eso sí, la falta de claridad. Quienes la consultan lo hacen con agonía. Es la lista de los productos de ayuda humanitaria que Israel no está dejando entrar a la Franja de Gaza. A medida que las palabras dejan de servir para describir la catástrofe que tiene lugar en el enclave palestino tras casi seis meses de guerra, las autoridades israelíes van sumando, de forma indirecta, nuevos productos salvavidas a esta lista. "Es muy difícil saber cuáles son realmente los elementos no permitidos", denuncia Miriam Marmur, directora de defensa pública de Gisha, una organización israelí de defensa de la libertad de movimiento en los territorios ocupados.

Tuberías, repuestos, generadores, paneles solares, filtros de agua, equipos de refugio temporal como postes de tiendas de campaña, equipos de comunicaciones y algunos tipos de equipamiento médico son productos que las autoridades israelíes han bloqueado en algún punto de los últimos seis meses. Antenas, dátiles, cables de fibras, sacos de dormir, pelotas, sillas de ruedas, muletas o tijeras se añaden a la infinita lista. Entre los puntos suspensivos imposibles de concretar, también hay cilindros de oxígeno, anestésicos y máquinas de anestesia, ventiladores, medicamentos para tratar el cáncer, kits de maternidad o de higiene, máquinas de rayos X, bebidas en polvo, linternas, camillas, plumas de insulina para niños enfermos de diabetes y orinales.

"Ayuda al otro lado"

"La entrada funciona a través de un régimen todavía más arbitrario", constata Vicente Raimundo, director de cooperación internacional y acción humanitaria de Save the Children, una de las decenas de organizaciones que se han visto afectadas por estas restricciones. De forma oficial, las autoridades israelíes han insistido en que "no hay límite" para la entrada de ayuda a Gaza. Pero la realidad sobre el terreno es otra. Tanto Naciones Unidas como varias organizaciones internacionales han denunciado que Israel impide el acceso a la ayuda imponiendo obstáculos durante la inspección y la distribución en la Franja. "Las inspecciones [de los camiones que transportan la ayuda humanitaria] son más lentas, largas e inquisitivas, y los motivos de denegación de permisos tienen muy poca lógica para muchos productos, lo que agrava una situación ya de por sí pésima", explica a este diario.

Mientras, la situación en la Franja de Gaza no deja de empeorar. Casi la totalidad de la población gazatí, unos 2,2 millones de personas, se enfrentan a una crisis de inseguridad alimentaria, de acuerdo al último informe de la Clasificación Integrada de las Fases de Seguridad Alimentaria (conocido como IPC), realizado por la ONU y otros grupos humanitarios. Más de 870.000 ya están en grado de emergencia y otras 670.000 en situación catastrófica. A su vez, esta ciudadanía hambrienta recibe menos de la mitad de la cantidad de alimentos que necesita para sus necesidades mínimas. "La gente está muriendo porque no recibe la ayuda que necesita y esa ayuda está al otro lado" de los cruces fronterizos de Rafah, en Egipto, y Kerem Shalom, de Israel, denuncia Raimundo.

Artículos de "doble uso"

A finales del mes pasado, el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, informó de que en Egipto, al otro lado del cruce de Rafah, hay 1.000 camiones con 15.000 toneladas de alimentos que siguen esperando la aprobación israelí para poder entrar en Gaza. "No es un problema de falta de voluntad, de mandato o de recursos; es un problema de que no se nos permite hacer nuestro trabajo", añade el representante de Save the Children, exasperado. Antes de la guerra, cada día entraban unos 500 camiones de ayuda. En las últimas semanas, han accedido una media de 159 camiones diarios. Sólo 111 transportaban únicamente comida. El Programa Mundial de Alimentos de la ONU considera que cada día se necesitan unos 300 camiones con alimentos para atender las necesidades básicas actuales.

Cada uno de estos camiones está sometido a diferentes procesos de inspección en diversos puntos de su recorrido. Si alguno de los productos que contiene es rechazado, toneladas de ayuda humanitaria son forzadas a retornar a la casilla inicial y empezar de nuevo todo el procedimiento. "Cada pequeño retraso en la entrada de un camión tiene un impacto realmente mortal", apunta Marmur, de Gisha. "Israel está bloqueando de manera inconsistente y poco transparente la entrada de ciertos productos, alegando que considera que hay ciertos artículos civiles que pueden usarse como acción militar", explica a EL PERIÓDICO. Son los llamados "artículos de doble uso". "Pero vemos que la definición de Israel es mucho más amplia que los elementos reconocidos internacionalmente", añade.

Lista del 2008

"Israel está tomando decisiones que no se pueden explicar que contribuyen al caos general que está teniendo lugar en Gaza", explica Marmur. Los pocos camiones que logran entrar en Gaza, y sobretodo aquellos que alcanzan el abandonado, asediado y destrozado norte, lo hacen a su propia merced. A menudo, son atacados por masas desesperadas por llevarse un pedazo de pan a la boca, por bandas armadas o por las propias tropas israelíes. "Esta cadena de problemas que perjudican a personas en situación muy crítica es una violación indirecta de la obligación de Israel como potencia ocupante de permitir el ingreso de todo lo que se necesite", añade. El Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios de Israel (COGAT, por sus siglas en inglés), encargado de gestionar estos ingresos, no ha respondido a la solicitud de explicaciones de El Periódico de Catalunya, del mismo grupo editorial que este diario.

Las organizaciones internacionales a cargo de la entrada de ayuda al enclave se guían por la única lista pública de artículos específicos de doble uso. Se trata de un documento de 2008, de los inicios del bloqueo israelí de Gaza, que enumera 10 categorías de elementos, como telecomunicaciones, electrónica, materiales avanzados, propulsión y seguridad de la información. Pero también usan la experiencia mutua. Si un convoy con dátiles, por ejemplo, ha sido rechazado, tratan de evitar incluir estos productos a sus camiones, por mucha carga calórica que contengan y pese a su relevancia como alimento usado para romper el ayuno en pleno mes de Ramadán. La urgencia es demasiado grande. "Cualquier retraso puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte", concluye Marmur.