La provincia está en el camino de batir, un año más, su récord de llegada de viajeros gracias a las buenas cifras de inicio de año y a la buena línea de la campaña estival, en plena efervescencia. En línea con el aumento que se está viviendo en el resto de España y la Comunitat Valenciana, Castellón ha batido en el primer semestre del año su récord de viajeros que han dormido en sus hoteles, al superar por primera vez el medio millón de visitantes alojados.

Concretamente, de enero a junio, 508.870 personas han pasado por los establecimientos hoteleros de las ocho comarcas castellonenses. Esto supone un 12% más de los registrados en el mismo periodo del año pasado (más de 54.000 turistas más) y supera el récord que hasta ahora estaba fijado en el primer semestre del 2007, el año previo a la crisis, con 488.097. Eso sí, las estancias en los hoteles son más cortas y las pernoctaciones, a pesar de crecer un 8,8% sobre el año pasado y registrar 1,44 millones, no han alcanzado las noches de hotel del 2007, cuando fueron 15.000 más.

A pesar de ello, los buenos datos de afluencia alegran al sector. El presidente de la patronal turística castellonense, Carlos Escorihuela, destaca que los socios de Ashotur están “muy contentos” con la precampaña, que ha sido “muy buena”. Y es que el pasado junio ha sido el mejor mes de todo el siglo, algo que también ha sucedido otros meses de este 2016, lo que ha llevado al récord en la primera mitad del año.

desestacionalización // Estos mimbres apuntan, poco a poco, hacia la desestacionalización del sector, una “esperanza” que en los próximos años irán “incrementando”, señala Escorihuela. Además de “estirar la temporada”, como lo define el dirigente turístico, el objetivo para los meses de menor afluencia es “remontar los resultados económicos”, con unos precios algo más altos que permitan ampliar el margen de beneficio, “muy exiguo” durante esa época. Eso sí, aunque no hayan demasiados beneficios, la mayor llegada de turistas permite “fijar las plantillas” y profesionalizar el sector, apunta.

Ahora, a las puertas del mes turístico por excelencia, y a pesar de que, según Escorihuela, julio no está mejorando las cifras de ocupación del año pasado, el sector ha notado “una ligera mejoría en el precio”, el otro gran caballo de batalla de los empresarios.

Entre los atractivos, el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, destacó ayer la calidad de las playas de la Comunitat, de las que el 58% cuentan con bandera Qualitur. H