Un salto cualitativo de dimensiones importantes». Así definen sus organizadores lo que supone para la provincia de Castellón el Festival de Manga que se celebra durante todo el fin de semana en el Centre de Congressos, Fires i Trobades de Vila-real.
Los aficionados a los cómics, los videojuegos y la cultura japonesa en general pudieron disfrutar ayer de un variado mercadillo de merchandising con 20 estands que traspasaban las fronteras de lo que tradicionalmente se ha considerado friki, e iban más allá. Había manga y anime, sí, pero también mucho producto de sagas con audiencias masivas, como Star Wars o las películas de Marvel y DC. Hoy, todavía podrán visitarlo durante todo el día por un precio de tres euros.
El portavoz de la organización, Santiago Izquierdo, reconocía que tanto para Otaku Castellón como para los amantes de la cultura manga, este evento supone «el más importante que se ha realizado en la provincia en los últimos años». «Hasta ahora estábamos acostumbrados a realizar jornadas, como las del Orgullo Friki, que en Vila-real son un referente, pero este evento, organizado junto al Ayuntamiento, supone ir más allá y mostrar nuestras aficiones en una infraestructura muy importante», añadió.
Fruto de ello es que los asistentes pudieron no solo comprar, sino también disfrutar de un sinfín de actividades, entre las que destacaron los concursos de softcombat, nerf, lasercombat o quidditch. Asimismo, hubo campeonatos de videojuegos, radio en directo, sorteos o gafas de realidad virtual en las que los usuarios podían luchar entre ellos como si fueran personajes ficticios o disfrutar de paisajes como un espectacular fondo marino.
CHARLAS // Entre las conferencias, destacó la que llevaba por título 25 años de manga en España, que repasó la no siempre fácil expansión de esta afición entre los jóvenes. Pero ahora, sostienen, han llegado para quedarse.
