En un mercado como el español en el que casi el 40% de las ventas de automóviles son crossover, las marcas compiten por presentar la oferta más adaptada a las necesidades de este escenario tan exigente y la última de ellas ha sido Skoda.

La firma checa ya lanzó en el 2016 el Kodiaq, su primer SUV, para un año después presentar a su hermano pequeño, el Karoq. Ambos han asumido el papel de representantes de esta categoría y como tales presentan características básicas de los crossover como el espacioso interior, las altas prestaciones en conectividad y en sistemas de asistencia a la conducción, pero sin olvidar, en ciertos casos, el rendimiento de un 4x4.

El Kodiaq, por su parte, presenta unas dimensiones más grandes que las del Karoq, ya que tiene una longitud de 4,71 metros frente a los 4,38 metros del segundo con una capacidad del maletero de 650 litros por 479 del Karoq.

Para aquellos que además necesiten más espacio, el Kodiaq más grande de esta gama SUV tiene la posibilidad de incorporar dos asientos más en sus variante Scout y Sportline, las últimas novedades para este modelo, y ofrecer así siete plazas. Ambos vehículos están disponibles en Marzá Import desde el pasado mes de enero.

Cero emisiones Skoda ya ha anunciado que en el 2019 ampliará su gama crossover con la incorporación del Vision X, un vehículo que combinará GNC, gasolina y electricidad, y un año más tarde, llegará el Vision E, un coche completamente eléctrico y con una autonomía de 500 kilómetros.

Desde la marca checa del grupo Volkswagen han querido confirmar que su plan de electrificación se culminará en el 2025, con la incorporación otros seis modelos completamente eléctricos y cuatro propuestas híbridos enchufables.