Garantizado el futuro del aeródromo del Grao durante los próximos años, el Aeroclub pretende ampliar el radio de acción del recinto a negocios privados que permitan captar actividad económica en Castellón.
El presidente del ente deportivo aeronáutico, Yuri Rabassa, ha asegurado a Mediterráneo que negocia con varias empresas interesadas en operar vuelos desde la pista del Serradal. “Hemos notado en los últimos meses, desde que se despejó el futuro del aeródromo, un interés renovado por el aeródromo, hay una industria muy importante que puede generar Producto Interior Bruto (PIB) si opera desde aquí”, ha señalado el dirigente del Aeroclub. Además del servicio de extinción de incendios, el aeródromo podría potenciar los vuelos para la realización de trabajos agrícolas o la formación en la escuela de vuelo”, ha añadido.
Rabassa ha reiterado que la organización de competiciones deportivas también focalizará el esfuerzo del Aeroclub para este 2014. “Somos el segundo centro de España y uno de los más importantes de Europa en saltos de paracaidismo, es una actividad que genera turismo para Castellón y queremos potenciarla”, ha remarcado Rabassa.
El presidente del club deportivo ya anunció el pasado martes al alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, su voluntad de negociar la organización de ferias internacionales aeronáuticas para captar pernoctaciones y actividad económica, en la línea de lo que el consistorio también persigue mediante la celebración de eventos deportivos. En los países del centro y norte de Europa es bastante común la celebración de este tipo de eventos feriales orientados a la aviación ligera. El objetivo es trasladarlas al zonas del sur del continente con una climatología más benigna, como puede ser el caso de la capital de la Plana.
Por lo pronto, el aeródromo del Grao albergará de nuevo este año competiciones nacionales e internacionales de caída libre, radiocontrol, rally aéreo o navegación aérea, entre otras. H
