Los alcaldes de los municipios taurinos de la provincia de Castellón no bajan la guardia e insisten en reclamar la derogación de la ley que contempla un segundo médico en los bous al carrer. Cerca de medio centenar de munícipes de la provincia, la mayoría de ellos socialistas, rubricaron una petición a Les Corts exigiendo la revocación frente a la moratoria de dos años, que fue lo que, finalmente, salió adelante, a petición del PSPV y Compromís.

Y es que en la provincia el apoyo a los toros es unánime, independientemente del color político de los consistorios. Los munícipes evitan entrar en clara confrontación con sus compañeros en Les Corts que votaron de forma contraria a su petición, que refleja el sentir mayoritario de todos los aficionados.

El alcalde de Onda e integrante de la comisión consultiva de los bous al carrer, Ximo Huguet, fue el que encabezó la recogida de firmas. «Nuestra postura es la derogación. Con la moratoria hay que intentar reconducir la situación con un consenso. Espero que no tengamos que agotar los dos años y se resuelva en los próximos meses», indicó el primer edil, quien confía en que la próxima semana se reúna la comisión consultiva de forma urgente para empezar a abordar dicho asunto.

En esta misma línea se manifestó la alcaldesa de Almassora, Merche Galí. «Mantenemos que no es necesaria la figura de los dos médicos. Las manos del doctor Traver y su equipo son la mejor garantía.

Por su parte, la munícipe de la Vall d’Uixó, Tania Baños, insistió en revocar la medida, pero espera que con la moratoria se llegue a un consenso que acabe con la polémica suscitada.

La alcaldesa de Burriana, Marias Josep Safont, remarcó que cree que es «suficiente» un facultativo, como ocurre ahora, mientras que el primer edil de Nules, David García, recalcó que sigue «defendiendo» la necesidad de derogar este punto. «Se debería derogar la normativa antes de que finalice la moratoria», apuntó, al igual que el alcalde de Onda.

Así también se manifestó el munícipe de Betxí, de Compromís, Alfred Remolar. «La moratoria es una solución correcta, pero soy partidario de que no haya un segundo médico en los festejos, no lo veo necesario».