Miles de agricultores miran al cielo cuando Castellón está ya a las puertas de la campaña citrícola. Y lo hacen para pedir, religiosamente o no, que el tiempo respete al campo y que los avisos de gota fría no se traduzcan en granizadas que estropeen la buena temporada que esperan empresas, organizaciones agrarias y trabajadores vinculados al sector, tanto en a producción como en número de contrataciones. En el ámbito laboral, no obstante, tanto las firmas exportadoras como las empresas de trabajo temporal alertan ante la falta de collidors que cubran el aumento de la demanda.

Según todas las fuentes consultadas, el aumento de la producción, que se situará entre el 15% y el 20%, provocará un incremento similar en el número de contratos temporales con los que comercios y cooperativas dan salida al repunte de trabajo que se produce, especialmente, en el último trimestre del año. Teniendo en cuenta que en la campaña anterior, que fue bastante peor a la actual en tonelaje, trabajaron unas 15.000 personas en la provincia, el incremento de naranja que prevén los empresarios y los sindicatos elevará el número de puestos de trabajo hasta casi los 16.000. Esta cifra incluye tanto los collidors como los puestos de manipulación en almacenes.

FALTA DE MANO DE OBRA // Pese a que la mayoría de firmas del sector tienen plantillas de fijos discontinuos bastante estables, estas ya comienzan a buscar, por sí mismas o a través de Empresas de Trabajo Temporal (ETT), perfiles para encajar o de técnico de calidad. No obstante, ya se detecta una creciente dificultad para incorporar recogedores de fruta.

El vicepresidente de la Asociación Profesional de Exportadores de Fruta de Castellón (Asociex), Pasqual Pla, explicó a este diario que el motivo principal es la recuperación de otros sectores, como la industria o la construcción, que «lleva a muchos a optar por trabajos más estables». A ello añade la Operación Retorno de muchos extranjeros que, con la crisis, se fueron a sus países y ya no han vuelto a la provincia.

También las ETT consultadas coinciden en la falta de candidatos, y suman a las causas el hecho de que hay muchos parados que rechazan los trabajos del campo por ser «duros». Así lo corrobora el gerente de Treball al dia, Antonio Ventura, quien añade que estos problemas no se dan en los almacenes, en cuyos empleos sí hay mucho interés.

OCTUBRE // Con todo, el grueso de las contrataciones para la recogida de la clemenules se realizarán a mediados de octubre y durarán hasta finales de diciembre o principios de enero. En cambio, la campaña de la naranja, que se suele alargar hasta finales de mayo, pero ya con un número muy reducido de empleados, podría acabar antes. En total, la producción citrícola en la provincia rondará las 650.000 toneladas.