Son las cosas del destino. La artista castellonense Ruth Sancho ha vuelto a casa, gracias a una beca del Gobierno australiano para que pueda desarrollar parte de su proyecto artístico y pedagógico en el hospital La Fe de Valencia.

“A parte del Royal Children Hospital de Melbourne tenía que elegir un hospital de otro país y opté por La Fe por estar cerca de casa y la conexión emocional”, señaló ayer Ruth, tras realizar un teatro a los niños ingresados en este centro sanitario, en el que las marionetas hechas a partir de materiales hospitalarios como radiografías, gasas, vendas o guantes de plástico fueron las grandes protagonistas.

Ruth trabaja desde hace 4 años en The Royal Melbourne Institute of Technology University, donde gracias a las ayudas estatales lleva a cabo una investigación con la que busca desarrollar herramientas artísticas que contribuyan a ofrecer nuevas terapias innovadoras para los pacientes más pequeños de los distintos hospitales.

Gracias a esta beca, que le cubre todos los gastos hasta mediados del próximo año, ha desarrollado, junto con otros profesionales, un juego que se proyecta en pantallas táctiles, donde los niños pueden visualizar las marionetas que ellos mismos han creado e interactuar con ellas.

De esta forma, los pacientes de la Unidad Pedagógica del Hospital La Fe han podido escuchar a través de esta aplicación los sonidos de los distintos animales que ellos mismos habían elaborado. Además, también contaron con divertidas sombras chinas realizadas con rayos X.

La idea de Ruth es poder llevar estos talleres y juegos interactivos a distintos hospitales y así mostrar a los distintos niños, a partir de la aplicación, las creaciones que otros niños anteriormente hayan realizado. “El objetivo es emplear el arte como terapia para conseguir que los niños ingresados estén mejor”, explicó esta castellonense, que gracias a la acogida de su proyecto en La Fe ya prevé visitar el hospital barcelonés Sant Joan de Déu.

TANZANIA // De todos modos, este verano seguirá con su periplo, la próxima parada será un orfanato de Tanzania para seguir con su proyecto, antes de regresar a Australia. “He trabajado mucho para conseguir esto”, remarcó Ruth, quien estudió arte dramático y filología inglesa. H