Las autoescuelas están en pie de guerra por la huelga parcial de examinadores que ya dura 38 días y “ha paralizado exámenes y prácticas, afectando al sector”. Exigen “soluciones al paro”, que ayer fue total y no solo de las tres últimas horas de la jornada --como en el último mes--, y fue secundado por el 50% de los examinadores. Lo explica Jaime Amorós, presidente de la Asociación de Autoescuelas de Castellón, que puso el foco en que “muchos alumnos han dejado de hacer prácticas al no poder examinarse, con listas de espera que ya son de un mes y suman más de 650 personas desde que los sindicatos activaron la huelga”. “Hay ya muchas pérdidas económicas, en una situación que se puede eternizar”, manifestó.
En Valencia, ayer, más de un centenar de responsables de autoescuelas, con 200 vehículos en la calle, se manifestaron ante la Jefatura Provincial de Tráfico para reclamar una salida a la huelga. Los datos a nivel autonómico son mayores, afectando a 5.000 alumnos que han tenido que aplazar sus pruebas, según el presidente de la Unión de Autoescuelas, Armando Galindo. “Hay compañeros a los que les cuesta pagar autónomos, despiden profesores o han bajado las persianas porque los alumnos prefieren hacer las prácticas cuando cese la huelga, con pérdidas de miles de euros”, apuntó el valenciano. H
