El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, firmó ayer con los representantes de 11 entidades bancarias las nuevas condiciones de devolución del préstamo de 48,8 millones de euros firmado en el año 2012 para saldar con los proveedores todas las facturas que entonces estaban impagadas.

El Gobierno central ofreció el pasado mayo a los ayuntamientos tres opciones para flexibilizar el pago de ese préstamo. El consistorio se acogió a ampliar un año más la carencia para obtener hasta 2016 una liquidez extra de 6.985.709 euros que íntegramente irán a pagar facturas pendientes. Además, la oferta del Ministerio de Hacienda ya rubricada rebaja del 5,5 al 4,23% el tipo de interés que abona el consistorio a las 11 entidades bancarias.

El primer edil enmarcó ayer la firma de las nuevas condiciones del préstamo de 48,8 millones del plan de pago a proveedores a “la buena gestión” del ejecutivo municipal y aseguró que el consistorio “dispondrá de más de 4 millones de euros extra de liquidez para el pago a proveedores” gracias al año de carencia y al “ahorro del gasto financiero”.

Bataller recordó que el Ayuntamiento “tiene equilibradas sus cuentas municipales” e incluso cuentan “con un superávit cercano a los 200.000 euros gracias al esfuerzo y la comprensión de los ciudadanos hacia las medidas que hemos tomado y a la buena gestión realizada por el equipo de gobierno y los funcionarios del área económica, que han llevado a este Ayuntamiento a que la deuda haya descendido a fecha de 30 de junio por debajo del 75% cuando el máximo permitido es del 110%”, concluyó.

La de ayer no es la única operación bancaria firmada este mes. El consistorio rubricó semanas atrás tres pólizas de crédito con el Banco Sabadell, Cajamar y BBVA para captar 30 millones de euros. El ejecutivo local destinará ese dinero a pagar a proveedores, atender el gasto corriente y obtener liquidez hasta principios del 2015. Según el consistorio, el ahorro ronda los 800.000 euros por la caída de los tipos de interés. H