Nadie tira la toalla. La victoria de Ernest Blanch --en apoyos y tras una accidentada primera vuelta de primarias-- como nuevo líder del PSPV da paso ahora a la siguiente batalla socialista en clave interna, la elección de delegados al congreso. En este contexto, las candidaturas que perdieron piensan en luchar --con distinta intensidad-- por obtener el mayor número posible de representantes, mientras Blanch anuncia que retomará los contactos con todos la próxima semana y, pese a lo ocurrido, insiste en ofrecer integración.

Tanto desde el entorno de Guanyar Castelló, lema de la candidatura de José Benlloch, como desde la plataforma Militantes en pie (Josep Lluís Grau es su portavoz), confirmaron ayer que tratarán de lograr el máximo número de delegados para el congreso del 16 de diciembre (16-D) en Almenara, al menos el equivalente a los resultados del pasado domingo. Aseguran que el fin es el de hacer valer los apoyos recibidos desde la militancia para llevar adelante en la medida de lo posible sus proyectos para el partido.

Es el acuerdo, más o menos tácito, de los últimos procesos y que no parece, a priori, tan sencillo en este. Si se llegara a un pacto, la mitad de unos 200 delegados en juego (el 50,10% con 726 sufragios) sería para Sumem futur, la opción del secretario provincial; el 32,30% (468 votos) para la de Benlloch y 15,87% (230 votos) para la de Josep Lluís Grau.

una semana // El plazo para preparar la elección de los representantes para el 16-D es de apenas una semana, ya que el congresillo de restos y la toma de decisiones sobre los delegados será el día 2.

Del lado de Benlloch y su equipo, optan, como adelantó su líder en la despedida de Diputación, por mantener su posición como grupo y ven difícil una integración. Por su parte, Grau señaló que su colectivo va a «seguir adelante». Ambos esperan una propuesta formal de Blanch.

Este último reiteró por la tarde su voluntad de integrar en el equipo provincial a todas las sensibilidades del partido y, «por supuesto», dijo, «a Benlloch y Grau». Ernest Blanch insistió en que «hay que hablar» para al menos intentar llegar al consenso.

la diputación // El secretario provincial electo no quiso valorar la salida de Benlloch de la Diputación, porque, apuntó, cumple «el reglamento que obliga a no hablar mal de los compañeros de partido ni de asuntos internos».

Sí recordó que ya dijo que creía que debía mantenerse como portavoz y no veía motivos para que se fuera, y deseó que el partido en colaboración con el grupo «encuentren la mejor solución» tras la dimisión. Por su parte, Grau dijo «respetar» la decisión de Benlloch, pero matizó que no cree que «sea buena para el partido».