El equipo de gobierno de Castellón deja en manos del consell rector del Patronat de Festes la decisión de abrir expediente disciplinario o no al presidente de la Junta de Festes, Juanvi Bellido, después de que el bipartito denunciara, mediante un comunicado enviado a los medios el pasado lunes, «gritos» y «falta de respeto de forma grave» de este a la edila y presidenta del Patronat de Festes, Sara Usó, el martes 6, en plenas fiestas de Magdalena. Extremo que el propio Bellido ha negado durante esta semana.

La portavoz del equipo de gobierno, Verònica Ruiz, insistió ayer en que, como gobierno, lo que hicieron fue denunciar que «no haya falta de respeto» y, a partir de ahí, «cualquier expediente disciplinario es competencia del consell rector» que espera que «resuelva este problema que tiene sobre la mesa cuanto antes». «Si hay falta grave o no, ha de ser el mismo consell el que no lo determine», insistió la concejala. A priori, se había avanzado que la reunión del consell se puede producir la próxima semana.

Ruiz también reconoció que la actual «no es una situación estimable para nadie», aunque todos pueden tener «momentos tensos». En cuanto a un hipotético punto de encuentro entre ambas partes, como así lo reclamaban varios representantes del món de la festa a través de este periódico, Ruiz reconoció que «se puede llegar a un punto de encuentro, solo si las dos personas quieren».

Al margen, hay que recordar que el bipartito elabora un informe de la gestión de Bellido.