El cambio climático continúa comportando modificaciones en el ecosistema y se enfrenta, ahora, a los alérgicos. Las escasas lluvias y las altas temperaturas registradas han provocado que este año el periodo de las polinizaciones se prolongue hasta dos meses más que el año anterior, alargándose hastael mes de julio.

“Este año será muy malo para los alérgicos”, declara el doctor Luis Toca, quien alerta de que los pólenes se están modificando de manera progresiva. La superposición de las estaciones ha causado que los síntomas se hayan adelantado. “En el mes de enero ya recibíamos pacientes con alergias”, declara el experto, sobre todo hacia las plantas arizónicas y el ciprés, variedades que han aparecido más pronto, así como la parietaria, que se ha adelantado a abril. Asimismo, Toca advierte de que los alérgenos del polen del olivo brotarán en mayo.

Por todo ello, un mayor número de pacientes presentarán este año signos de alergias y, además, los síntomas serán más peligrosos. “Los pacientes asmáticos son los que peor lo van a pasar porque tendrán más crisis”, indica. Algo que comparte el doctor Tamim Malek: “Este año, los que padecen rinitis y asma estarán peor de lo habitual”, cuenta. Y la contaminación será, a su vez, un factor que agravará este panorama. “Provoca una polinización más agresiva, sobre todo los vehículos diésel porque desprenden partículas que modifican el volumen, el peso y la duración del polen”, manifiesta. Y es que la polución provoca que los alérgenos del polen se unan a los derivados del petróleo, originando un aptano que está formado por una molécula que el cuerpo no reconoce y, por tanto, rechaza. Por su parte, el jefe del departamento de Alergología del Hospital General, Antonio de Mateo, explica que en esta primavera “se ha visto una alta incidencia de síntomas”, y revela que cada vez es más frecuente que estas enfermedades se manifiesten por primera vez en adultos, mientras que antes la mayoría de pacientes eran niños y muchos adolescentes. H