Los 68 desempleados contratados a través del plan de empleo conjunto auspiciado por la Generalitat empezaron ayer a trabajar en diferentes tareas asignadas. El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, encabezó el acto de inicio.

El plan posibilita la contratación de estas 68 personas durante dos meses, de forma que concluirán su actividad el próximo 30 de diciembre. La nueva edición del plan de empleo conjunto --la anterior se saldó con fracaso al darse de alta solo 16 contratos en la capital-- está presupuestada en 382.058 euros. De esa cantidad, la Diputación aporta 251.468 euros y el consistorio los restantes 130.590 euros.

El primer edil defendió la importancia de “este compromiso del equipo de gobierno con la potenciación del empleo en beneficio de la ciudadanía, que ha logrado que 68 personas que ayer estaban en el paro tengan hoy un trabajo”, afirmó el primer edil.

El plan de empleo conjunto contempla 72 plazas en la capital, por lo que han quedado vacantes cuatro de ellas. En las próximas semanas se volverá a realizar el proceso de selección para cubrir estas plazas a las que se han renunciado en primera instancia.

Las plazas cubiertas en el consistorio castellonense son de administrativo, auxiliares administrativos, auxiliar de teleayuda, educadores sociales, informador sociolaboral, informador turístico, mediadores interculturales, monitor de tiempo libre, oficial de fontanería, oficiales de jardinería, oficiales de pintura, peones de almacén, peones de limpieza, psicólogos, técnico medio de gestión administrativa, técnico de animación sociocultural y trabajadores sociales. H