Con un guiño ya a las celebraciones del 2017, cuando se cumplirán los 300 años del copatronazgo de Sant Blai en Castellón, la calle que lleva el nombre del obispo de Sebaste ha iniciado sus fiestas populares, les festes de carrer de mayor solera, tradición y abolengo de la ciudad.

Unos festejos que arrancaron en la tarde de ayer con la inauguración del altar con la imagen del santo en el domicilio de los clavarios, una responsabilidad que este año ha recaído en José Luis Rubio Cervera y María Lidón Gomis Montañés. Un clavariato ejercido desde la devoción y el fervor de una pareja que cumple, además, su 25º aniversario de matrimonio. Y es que, si algo caracteriza a esta festa de carrer es la vinculación directa con los vecinos, “que son el alma de las fiestas de la calle”, como se encarga de recordar Clara Soler, presidenta de la comisión de fiestas.

EL ALTAR // Los actos se iniciaron con la inauguración del altar con la imagen del santo armenio, en el número 11 de la calle, donde residen los clavarios, con un pasacalle a ritmo de dolçaina i tabal, prólogo a los días grandes de hoy y, especialmente, mañana, fiesta principal de esta arteria urbana de la capital siempre fiel y constante a sus tradiciones.

Soler, pese a reconocer que “cada año cuesta más organizar la fiesta, nos sentimos satisfechos o de la gran colaboración de los vecinos, que muestran su entusiasmo cuando se acercan estos días”. Unas celebraciones que tendrán como novedad el estreno de un nuevo espectáculo infantil de Xarxa Teatre hoy. H