Mucho debate y pocos acuerdos. El pleno mensual de la Diputación se prolongó durante casi tres horas aunque solo parte del debate económico y la moción del PP que pide que no se derriben más chalets en la costa salió adelante con el visto bueno de los tres grupos políticos.

La nueva ley de Costas podría ver la luz en cuestión de días puesto que la Administración estatal está ultimando un documento sobre las variaciones a aplicar respecto a la actual normativa. Sabedores de ello, la institución provincial sumó ayer esfuerzos para exigir al Ejecutivo de Mariano Rajoy conciliar más adecuadamente la defensa de la integridad física y el uso público del dominio público marítimo terrestre. A la moción de los populares se agregó una enmienda del Bloc en la que se solicita que se incluya en las reivindicaciones la transferencia de competencias a las comunidades autónomas. Finalmente, todos estuvieron de acuerdo e irán de la mano en las exigencias a tener en cuenta en la futura normativa que debe redactar el actual Gobierno central.

El otro apartado en el que también se logró unanimidad fue en la concesión de crédito que va a permitir a la Diputación adelantar 36 millones de euros a 76 municipios correspondientes a la recaudación de impuestos y que, en principio, se debería abonar en verano. Miguel Barrachina, vicepresidente económico, agradeció la confianza a las cinco entidades bancarias que han hecho posible esta operación “que llega por el trabajo bien hecho que previamente han realizado los servicios de intervención y tesorería de esta casa”. También se acordó invertir en los pueblos los casi 20 millones de superávit alcanzados en el 2011, y que supondrán 136 actuaciones que no se habían podido ejecutar. “Como ya anunciamos, el encogimiento en inversiones era temporal, y ahora se ve que cumplimos nuestra palabra. Nuestro potencial inversor pasa de 17,4 millones a 34,5”, explicó.

Sobre este último punto, el portavoz socialista, Francesc Colomer, aseveró: “Pido prudencia respecto a este milagro de la multiplicación de los panes y los peces. Si hay tanto dinero ahora, ¿no será porque la ejecución del presupuesto se hizo mal?”.

NO A LA OPOSICIÓN // La sesión de ayer dio para poco más. A partir de este punto todo fueron negativas del PP a cada una de las mociones del PSPV-PSOE y Bloc, ya fueran de citricultura, de la deuda del Consell, de la reforma laboral de Rajoy, de la carga policial de estos días en Valencia o de infraestructuras. La oposición reclamó una comisión de trabajo y seguimiento de las inversiones que el Estado tiene pendiente con Castellón, pero Vicent Sales, portavoz adjunto popular, justificó la negativa de su grupo alegando que en noviembre se aprobó un decálogo de reivindicaciones al Gobierno “donde se recogen los aspectos que ahora reclaman. Hemos sido reinvidicativos antes y lo seremos ahora”. H