La Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Castellón trabaja en la confección de un plan para mejorar la circulación dentro de la Ciudad del Transporte, centrado en uno de los cruces centrales --situado entre Decathlon y el centro de oportunidades de El Corte Inglés-- y en la rotonda de acceso sur a la ciudad, situada junto al centro comercial Salera.

En el primero de los puntos se quiere poner solución al hecho de que concentra numerosos cruces y sentidos de circulación, lo que lo convierte en un emplazamiento que “no nos gusta”, manifiestan desde el área de Movilidad.

Por su parte, en la rotonda, uno de los principales accesos a la capital de la Plana, se considera que la mejor solución es cortar una de sus salidas, de modo que los vehículos que llegan desde la CV-17 no reciban tráfico de la rotonda por su parte izquierda, lo que hará que no tengan que esperar a que esté libre para pasar.

De este modo, se pretende hacer más fluida la circulación en este vial, que recoge tráfico procedente de la N-340, la AP-7, de polígonos industriales e incluso de fábricas de l’Alcora. De hecho, esta solución fue puesta en marcha a principios del mes pasado de modo temporal para que los técnicos municipales analizaran cómo afectaba a la circulación.

Sin embargo, para poder activar esta modificación del tráfico, “hay que mejorar la movilidad de toda la zona”. Esto implica, por una parte, habilitar otra salida hacia la ciudad desde el barrio de San Lorenzo, ya que de lo contrario esta reordenación lo dejará aislado. Y es que hay que recordar que cuando se hizo el corte temporal, la asociación de vecinos ya reaccionó con quejas.

Esta actuación se llevará a cabo a través de la gestión directa por parte del Ayuntamiento de la Unidad de Ejecución 36. Se trata de unas obras de urbanización en la Cuadra Saboner que se quedaron sin acabar y que, una vez finalizadas, abrirán accesos que en la actualidad están cerrados. H