Moliner ha presentado la solución definitiva y más eficiente que permitirá tratar las aguas residuales de Borriol en la depuradora de Castellón. El nuevo proyecto conecta y mejora las canalizaciones de ambas ciudades y aprovecha el exceso de capacidad de depuración de la capital, evitando de este modo tener que expropiar los polémicos terrenos sobre los que debía construirse la infraestructura y cuya compraventa está estudiando ahora la justicia, tras la denuncia presentada por Compromís de Borriol.

La nueva propuesta ha sido presentada esta mañana por el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, en compañía de los alcaldes de Castellón, Alfonso Bataller, y de Borriol, Ibán Pauner, quienes han asegurado que, en pocos meses, el municipio de Borriol verá resuelto su problema de aguas residuales, por falta de capacidad de la antigua depuradora, con la solución definitiva y más eficiente.

El proyecto consiste en la conexión de la red de aguas de ambos municipios, con el objetivo de canalizar las aguas residuales de Borriol hasta la estación depuradora de la capital, donde serán tratadas aprovechando la capacidad sobrante de depuración de ésta.

La inversión, financiada íntegramente por la Diputación, será la misma que la inicialmente presupuestada para la depuradora de Borriol, 2,2 millones de euros, de los cuales un millón se destinará para ejecutar las nuevas canalizaciones y el resto para mejorar los tramos afectados en la red hídrica de Castellón. Por su parte, el Ayuntamiento de Borriol se ahorrará los 150.000 euros previstos en la compra de terrenos para albergar la infraestructura proyectada.

"Es un proyecto donde todos ganamos: los vecinos de Borriol ven resuelto su problema y se ahorran dinero, la ciudad de Castellón recibe mejoras en sus canalizaciones y esta casa ve cumplido su histórico compromiso, de la forma más eficiente y transparente posible, de depurar el 100% de las aguas residuales de este pueblo vecino", ha apuntado Moliner.

La canalización discurrirá en paralelo a la autovía CV-10, pasando por el polígono industrial de Borriol, y conectará con la de la ronda oeste de la ciudad. En total serán nueve kilómetros de nuevas canalizaciones. Hay que señalar que la necesidad de depuración del núcleo urbano de Borriol es de 1.200 metros cúbicos, lo que representa un 2,4% de la capacidad de la estación depuradora de Castellón.

Renuncia de la empresa adjudicataria

Por otro lado, cabe destacar que la empresa adjudicataria de la depuradora de Borriol ha renunciado voluntariamente al proyecto, lo que facilitará y acelerará el inicio de las obras de la solución presentada hoy, la cual ya se encuentra en fase de redacción técnica. De esta forma, la antigua EDAR de Borriol se convertirá en una estación de bombeo para transportar el agua, mediante las nuevas canalizaciones, hasta la altura del Mercado de Abastos, donde conectará con la red de la capital y desembocará en la estación depuradora.

Por último, el presidente provincial ha mostrado su agradecimiento a Alfonso Bataller "por la solidaridad que, una vez más, ha demostrado la ciudad de Castellón, ejerciendo de capital de provincia", además de felicitar al Ibán Pauner por "luchar por esta solución conjunta, optimizando recursos y despejando todas las dudas sobre el procedimiento, ya que la canalización se realizará íntegramente por terrenos públicos".