Casarse es un negocio incierto, una especie de cara y cruz. Y lo es cada vez más. En Castellón, por cada boda y media se registra un divorcio, y la distancia entre los que se unen y los que se separan es cada vez más corta. Si la tendencia se mantiene, es más que probable que en unos pocos años las rupturas superarán a las uniones matrimoniales.

Durante el 2017, y según los últimos datos que maneja el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), las rupturas matrimoniales sumaron en Castellón un total de 1.497. Aunque la cifra supone un 7,2% menos que un año antes, la estadística muestra como cada día se rompen cuatro matrimonios en Castellón.

Pese al descenso del último ejercicio, la cifra de parejas que hoy deciden poner fin a su matrimonio sigue siendo muy superior a las que lo hacían hace 20 años. Un dato basta para entenderlo: en 1997 se contabilizaron en la provincia 1.039 separaciones, divorcios y nulidades, un 44% menos que el año pasado.

Mientras, los divorcios se aceleran, a las bodas les ha ocurrido exactamente lo contrario. En el 2016 (no hay datos más recientes), 2.042 parejas de la provincia se unieron en matrimonio. La mayoría (1.500) se casaron por lo civil, mientras que solo 518 lo hicieron por la Iglesia. Hace dos décadas, el número de enlaces matrimoniales alcanzó los 2.359, o lo que es lo mismo, un 15% más. Además, en 1997, lo mayoritario en Castellón era casarse por la Iglesia y, de hecho, fue la opción elegida por más del 80% de las parejas de la provincia.

RUPTURAS A LOS 65 AÑOS

Las rupturas matrimoniales se han disparado por encima del 40% en las últimas dos décadas en Castellón, y quienes deciden poner fin a su matrimonio pasados los 65 años son cada vez más. El aumento de la esperanza de vida está provocando que año tras un numero cada vez más alto de jubilados de la provincia se planten ante el juzgado con una demanda de divorcio. Y el INE le pone números a esta realidad. En Castellón, el año pasado 59 parejas que superaban los 65 años decidieron poner fin a décadas de convivencia. Tres años antes, los divorcios sénior se quedaron en 30.