Los cazadores capturan ahora en Castellón cuatro veces más jabalíes que hace una década, más de 5.000 al año. Sin embargo, hay más que nunca y, además, se acercan paulatinamente con más frecuencia a zonas urbanas, como ocurrió recientemente en Vila-real, con un jabalí buscando comida en los contenedores de basura, como informó Mediterráneo. Los datos y valoraciones las aporta Leonardo Gil, responsable de esta modalidad de caza mayor dentro de la delegación de la Federación de Caza en Castellón, quien indica que “se cazan ahora cuatro veces más jabalíes que hace diez años y, sin embargo, cada vez hay más ejemplares”.

Gil, quien informa de que la actual temporada --ahora en pleno apogeo-- “va bien, de momento”, explica también que “no hay censos actualizados, que sepamos, de cuál es ahora la población real de estos animales, pero lo que tenemos claro es que ha crecido de forma muy importante”.

En cuanto a los perjuicios que causa lo que, a menudo, se califica como una plaga, vaticina que “los daños que provocan los jabalíes van a ir cada día a más y se verán más a menudo en zonas urbanas”. Según el experto, el control de la población en la franja litoral “no existe, porque no hay cotos, no se caza, mientras que están llegando a zonas urbanas y acabarán por llegar a la costa”.

Leonardo Gil recomienda a los propietarios de terrenos afectados por jabalíes en un momento dado en poblaciones como Vila-real, Castellón, Almassora, Nules o Burriana, que “soliciten a la Conselleria de Medio Ambiente permisos para cazar “en espera”, algo que se puede hacer con la autorización especial, como ya ocurrió el año pasado en algunos casos. Desde su punto de vista es el único paliativo, ahora que la sequía también empuja a los jabalíes hacia las zonas llanas. H