La industria azulejera española e italiana van parejas, de ahí que coincidan en el grueso de los asuntos que preocupan en sus agendas. El presidente de Confindustria Ceramica, Vittorio Borelli, afirma que hay «dos grandes riesgos» que el sector debe afrontar en este año 2017. A juicio de Borelli, estos son la continuidad del veto a la importación de las baldosas chinas en el seno de la UE y la revisión del comercio de emisiones de CO2.

«El pasado 11 de diciembre, la Comisión Europea no ha concedido el estato de Economía de Mercado a China, como es justo que sea, no habiendo este país cumplido ninguno de los cinco requisitos establecidos en el acuerdo de ingreso de el World Trade Organisation. A esto le damos una valoración positiva, pero sin olvidar que la misma Comisión Europea ha propuesto una nueva investigación por dumping menos restrictiva que la anterior. Instamos al Parlamento Europeo, a partir de nuestros representantes, a que emitan un juicio negativo durante la fase de discusión parlamentaria», argumenta.

Ascer coincide en este extremo con sus colegas italianos, ya que consideran que la prórroga de 15 meses es limitada para una amenaza que continúa siendo real, y aspira a que la UE renueve las medidas antidumping mediante aranceles para las importaciones de baldosas chinas.

HORIZONTE 2020 // La segunda gran preocupación para los empresarios de Italia está ligada a la competitividad de las empresas. «El sistema de comercio de emisiones tiene un gran peso en las trabas burocráticas, incluso para un sector como el nuestro, que debe continuar invirtiendo significativamente en la reducción de emisiones. Esperamos que la revisión, válida hasta el año 2020, aumente los apoyos para aquellos sectores que tanto han hecho ya en ese sentido, para evitar posteriores cortapisas en la competitividad», consideran.

Por parte de España, Ascer añade otras cuestiones como la revisión tributaria que ha anunciado el Gobierno, aumentando la presión fiscal sobre las empresas, y que repercutirá en una reducción de fondos destinados a la inversión en mejoras competitivas de las instalaciones, para seguir ganando productividad frente a un mercado globalizado.