Carles Mulet, responsable de Compromís en Castellón, reiteró ayer la petición de que se retiren los crucifijos de las habitaciones del Hospital Provincial, e hizo alusión a la aconfesionalidad del Estado. Así lo apuntó después de que el Gobierno valenciano haya señalado en una respuesta parlamentaria que “ve normal” la presencia de estos símbolos religiosos dentro de las habitaciones del centro.

En el documento, el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, señala que el centro es “totalmente respetuoso con la libertad de culto” y que “no ha habido quejas al respecto”. H