El conflicto lingüístico del valencià en las aulas sigue vivo también en las tribunas políticas. La Diputación fue ayer el foro de debate, en el que PSPV y Compromís siguen presentando mociones para parar el cierre de aulas en la lengua autonómica, mientras que el PP sigue desestimándolas.

PSPV presentó una moción al próximo pleno para que pida a la Generalitat una nueva propuesta de arreglo escolar, rebaje la ratio y anule el distrito único; que apueste por programas de inmersión en valenciano, “los únicos que pueden garantizar una verdadera educación plurilingüe”, dicen, y que no se elimine ninguna aula de este tipo. Compromís, por su parte, redundó en exigir al Consell que se mantengan todas las líneas en valencià de Castellón y que respete el criterio del consejo escolar.

El PP rechazó ambas mociones y señaló, ante las críticas de la oposición, que “una cosa es defender el valenciano y otra erradicar el castellano”. H