El Rotary Club Castellón-Costa Azahar mostró su vertiente más solidaria. Fue en una cena de gala, de carácter benéfico, que se celebró anoche en el Casino Antiguo. Junto a los socios de la institución rotaria, una larga nómina de invitados, encabezada por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra; así como el presidente de la Diputación, Javier Moliner; el alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, y el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, se dieron cita en un evento que reunió a lo más granado de la sociedad castellonense. No faltó el concejal de Cultura y diputado provincial, Vicent Sales.

Los fondos recaudados van destinados al proyecto que está impulsando el Hospital General Universitario de Castellón, para la creación de un centro de día pediátrico, para tratamiento de niños oncológicos, entre otros. Así se comprarán los sillones especiales que requiere este tipo de centro tan deseado. La junta directiva del Rotary Club Castellón-Costa Azahar, con su presidente a la cabeza, Pepe Boix, ejerció de perfecta anfitriona. Estuvieron, entre otros, el secretario, Ignacio López-Lapuente, y el tesorero, Jesús Merino.

COLABORADORES // También colaboraron numerosos patrocinadores y comercios de la provincia, aportando obsequios y regalos para el sorteo que se realizó después de compartir mesa y mantel en los nobles salones de un Casino Antiguo que cumple su bicentenario. Cabe destacar la implicación de empresas de hondo arraigo en la provincia como UBE Chemical o BP, cuyos representantes, Jerónimo Porras y Emilio Marín, estuvieron presentes. Pero también rotarios ilustres como Rafael Cerdá, Manuel Breva, Rafael Montero (secretario de la CEC), José Luis Breva y Carlos Cabrera.

Otros empresarios que expresaron su adhesión al proyecto benéfico fueron Joaquín Farnós, José Luis Martinavarro y Carlos Fabregat. Del ámbito sanitario acudieron el gerente del Hospital general, Javier Peñarrocha, y el secretario autonómico de Sanidad, Luis Ibáñez. H