El Consell reconoce que el riesgo de incendios es muy alto y pide la máxima colaboración. Con la tragedia de Portugal presente, en un junio marcado por temperaturas de récord y a las puertas de un verano que suele ser época de máximo riesgo de incendios, los expertos alertan de que factores como las olas de calor, la falta de limpieza del monte tras los temporales de invierno y el abandono de cultivos complican aún más la delicada situación.

La consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, asegura que «el riesgo de grandes incendios en la Comunitat es muy alto y durante todo el año» y «cada vez mayor». Pide «máxima precaución», ya que el 80% de los fuegos son causados por el hombre, y defiende las «políticas de prevención».

DRONES

Ximo Puig, presidente de la Generalitat, destaca la colaboración necesaria entre todas las instituciones para luchar de la forma más eficaz contra el fuego, y apela a la concienciación ciudadana. Entre las novedades de esta campaña se incluyen dos drones, más medios aéreos y más dotaciones de bomberos.

Igualmente, Ferran Gandia, de Acció Ecologista Agró, señala que cualquier día puede declararse un fuego, pero con altas temperaturas, vientos de terral, sequía y falta de humedad es más fácil que pueda derivar en un gran incendio. Por ello, apela a la «responsabilidad», pues la gran mayoría los causa la mano humana y buena parte, por negligencia.

«Hay que trabajar mucho más la prevención», dice Francisco González, de Gecen. Así, indica, hay muchas quejas de los municipios respecto a la falta de diligencia en la limpieza del monte tras el temporal. Además, censura que la vegetación autóctona se ha sustituido por otra, más pirófica, como los pinos. «El monocultivo forestal es un gravísimo problema ante un incendio, porque lo hace más inflamable», avisa. Aboga por recuperar los alcornoques y carrascas primigenios y por crear cortafuegos agrícolas recuperando bancales.

Dionís Montesinos, delegado de CCOO de los Bomberos Forestales, también alerta sobre «las grandes acumulaciones de material vegetal muerto, a causa de plagas y grandes nevadas de este último invierno», a lo que se une el «cambio climático, con olas de calor cada vez más largas y tempranas». Montesinos indica que con el cambio de uso y el abandono de cultivos y zonas rurales, la masa forestal ha aumentado eliminando las discontinuidades que antes ayudaban en la lucha contra los incendios.

Montesinos también reclama la activación de planes de autoprotección en urbanizaciones de montaña, para planificar criterios de evacuación, localización de hidrantes o franjas que ejerzan de cortafuegos y pide más bomberos forestales.

Pero no todo es malo. Ahora han comenzado a operar las reivindicadas brigadas forestales. Además, Gandia aplaude que el Consell haya trabajado en la estrategia valenciana para combatir incendios, aunque falta que se traduzca en el día a día. Algo que, dice, aún no ha ocurrido por falta de tiempo y financiación. Y también que las alertas por preemergencia se hagan ahora con un día de antelación.