El Gobierno valenciano y los agentes económicos, empresarias y sociales de la Comunitat Valenciana han reclamado de forma "unánime" que la red ferroviaria transeuropea vuelva a incluir la conexión del corredor mediterráneo a su paso por València con las fachadas Atlántica y Cantábrica, como se recogía en la propuesta inicial de España, modificada por el anterior Gobierno del PP.

El president de la Generalitat, Ximo Puig, se ha reunido con la Autoridad Portuaria (APV), la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), la Confederación de Empresarios (CEV), el Consejo de Cámaras de Comercio y los sindicatos UGT y CCOO para analizar un cambio "ilógico y absurdo" que, ha denunciado, "margina a la parte más productiva" de España y "aísla" al puerto de València y la Comunitat y les resta competitividad.

Puig ha acusado al gobierno del PP de actuar "de espaldas a las comunidades, al menos de la Comunitat" y hacerlo con "nocturnidad y alevosía" por no informar y ha sostenido que puerto, empresarios, sindicatos y gobierno tienen "una posición unánime" en esas dos reivindicaciones, además de asegurar que "hay tiempo" para lograrlo porque Europa votará la propuesta definitiva en octubre.

Ha defendido que València es el primer puerto de contenedores y de salida de exportaciones, por lo que esos cambios le ponen en "clara desventaja", además de que "tienen consecuencias en las estrategias de inversión europea de los corredores" y ha anunciado que la próxima semana se reunirá con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, al que ve "buena predisposición" y en el que confía que pida la modificación, y aprovechará su viaje a Bruselas para tener contactos al respecto.

El president ha advertido la "enorme preocupación" de la actual propuesta por sus "consecuencias a largo plazo" y ha asegurado que la Comunitat "no está dispuesta a perder ni una oportunidad más y es fundamental las conexiones a estos corredores".

"No hablarnos de una inversión concreta sino de situarnos en el mapa", ha sostenido y ha incidido en que "a corto plazo no es una cuestión financiera sino de la definición de los futuros corredores", a la vez que ha dicho "desconocer" las causas de la decisión del PP de cambiar a una propuesta que "no se corresponde con la realidad del país".

"La noticia la conocemos a través de una nota de prensa en la que Fomento ve como una victoria la decisión de la UE de aceptar su propuesta. Blanco y en botella", ha sentenciado.

El presidente del puerto, Aurelio Martínez, ha advertido que las futuras inversiones estarán "donde estén las redes traneuropeas y València ahora está solo en el Corredor Mediterráneo, que está sin terminar", y el del Consejo de Cámaras, José Vicente Morata, que "cualquier decisión futura tiene que ver con estar pintado en la red europea o no estar".

El presidente de AVE, Vicente Boluda, ha manifestado la diferencia entre estar o no en el mapa: "el que no está tiene la posibilidad de conseguir un 10 % de su coste en subvenciones y el que está puede llegar al 75 % de fondos europeos".

La presidenta de la Asociación de Empresarias y Profesionales de Valencia, Eva Blasco, en representación de la CEV, ha hecho hincapié en que la competitividad que pueda ganar la Comunitat con estos ejes "es en el fondo un aumento de la competitividad de Estado Español" y los secretarios generales de CCOO PV, Arturo León, y UGT PV, Ismael Sáez, han advertido que la pérdida de inversiones repercutirá en la creación de empleo y el desarrollo económico.

En la reunión también han participado el secretario autonómico de Obras Públicas, Josep Vicent Boira, que se ha preguntado por los criterios objetivos de este cambio, ya que todos los puertos que han entrado en la reforma suman "el 20 % de todo el tráfico de contenedores" de València, y la eurodiputada socialista Inmaculada Rodríguez-Piñeiro, quien ha insistido en que "trabajarán intensamente" para que "esto tenga remedio".