El exceso de velocidad, el consumo de alcohol o drogas y el inadecuado mantenimiento del vehículo son las tres infracciones más comunes que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han constatado entre los 8.168 vehículos controlados en la provincia de Castellón durante los siete días de la campaña de vigilancia de la conducción en carreteras convencionales desarrollada por la Dirección General de Tráfico entre el 20 y el 26 de octubre. En la misma, 564 conductores han sido denunciados.

De este total, 303 (53,72% de los denunciados) han sido sancionados por circular a una velocidad superior a la permitida.

Otros 22 fueron denunciados por no llevar el cinturón de seguridad o hacer un mal uso del mismo. Además, cuatro más transportaban a menores sin el obligatorio sistema de retención.

Durante la campaña de vigilancia también se ha constatado que el uso del móvil durante la conducción sigue siendo una acción habitual entre los conductores. En concreto, se han detectado 19 infractores en Castellón.

En cuanto al consumo de alcohol y drogas, 33 personas han dado positivo en la provincia y cinco por otras sustancias.

Además, debido a las peculiaridades de las carreteras convencionales, los adelantamientos, los cruces de vías o las prioridades de paso han sido especialmente controlados. Cuatro conductores efectuaron adelantamientos antirreglamentarios y otros 5 fueron sorprendidos saltándose un stop.

Asimismo, la falta de mantenimiento y el envejecimiento del parque móvil hacen que circulen por las carreteras vehículos con deficiencias técnicas, como se verifica en los 24 titulares que han sido denunciados por este motivo. A ellos se suman otro conductor al que la Guardia Civil inmovilizó el vehículo por deficiencias técnicas que hacían imposible continuar el trayecto.

Además, 19 conductores han sido denunciados por carecer o ser incorrecta la documentación relativa al vehículo, la mayoría por no tener pasada la ITV, y otros 24 por la documentación relativa al conductor del coche. H