El Mijares a su paso por los términos municipales de Vila-real, Almassora y Burriana se ha convertido desde hace más de 1 año en un verdadero río con un caudal de agua permanente y considerable. Esta situación extraordinaria no se producía desde hace muchos años. De hecho lo más habitual era contemplar los últimos 15 kilómetros del río con un caudal de agua intermitente. En muchas ocasiones era frecuente ver seco y sin una gota de agua parajes como la playa del Mijares a su paso por el Ermitorio de la Virgen de Gracia o los tramos del río aguas abajo de los azudes de Almassora y de Burriana. "Este año está siendo raro porque el río no ha sido casi nunca así. Las circunstancias de este año son que el río lleva agua por decisiones antrópicas. Son las sociedades de regantes las que determinan si el río llevará agua o no y también la obligatoriedad de cumplir con la normativa legal >>, señaló el ornitólogo Joan Castany que desde hace 29 años estudia aves en la desembocadura del río Mijares .

La gola sur del río Mijares ubicada en el término municipal de Burriana también se encuentra abierta desde hace más de 1 año. Esta circunstancia ha provocado que las condiciones ecológicas del ecosistema fluvial también hayan cambiado. "Ha sido más determinante la fuerza del río que baja que la fuerza del mar que entra y por eso la gola está abierta desde hace más de 1 año. Significa que no han habido suficientes temporales de levante para tapar la gola. El agua del mar entra hasta más allá de 1 kilómetro tierra adentro. Está muy salinizado. Esto a muchas especies de aves como los patos, las fochas comunes y los calamones no les gusta porque es un ambiente muy salino. Resisten una cierta salinidad pero no tanta salmuera. Por ejemplo hay lisas y lubinas a 1700 metros de la desembocadura. Lo que ha ocurrido este año es muy importante" puntualiza Castany.

UN AGUA QUE RIEGA EL MEDITERRÁNEO// Aparte de las aves acuáticas, los mamíferos, los macro invertebrados y los peces de agua dulce uno de los grandes beneficiados de esta situación es el mismo Mediterráneo. Hace poco más de un año que el río Mijares vierte agua dulce en el mar. Esta situación natural es inmejorable para todo tipo de organismos marinos.

El río lleva sales minerales en suspensión que vierte en el Mediterráneo. El fitoplancton se alimenta de estas sales minerales al tiempo que el zooplancton se alimenta de este. En aquellas zonas donde hay una abundancia de zooplancton se producen grandes concentraciones de peces, normalmente pequeños pelágicos y otras especies que se alimentan del zooplancton. Por lo tanto el río Mijares con su agua permanente riega y da riqueza al Mediterráneo, una situación de la que también se favorecen los pescadores profesionales además de todo el ecosistema.