Decenas de personas se concentraron ayer a las puertas de la Conselleria de Educación en València en señal de protesta por el elevado número de aspirantes que no superaron las últimas oposiciones docentes y para reclamar una revisión de las pruebas, así como un nuevo sistema de ingreso más justo y objetivo. Y es que, según denunció la víspera el sindicato Stepv, solo 5.448 aspirantes de los casi 17.000 inscritos para optar a 3.000 plazas de maestro aprobó, es decir, el 35%. En Castellón fueron 2.711 las personas que se presentaron.

El portavoz del Stepv, Marc Candela, señala que el director general de Personal Docente, Joaquín Carrión, «se ha comprometido a introducir mejoras y cambios» en futuras convocatorias, si bien a estas alturas, en relación al proceso selectivo de este año, el asunto está zanjado.

Por su parte, la abogada Rocío Fuentes Gala, encargada de tramitar las demandas judiciales de algunos candidatos que no superaron las pruebas, indica que «como en todas las oposiciones», puede haber suspendidos, pero «lo que no se contempla es que haya gente suspendida por alguna indicación» y no en función de criterios objetivos.

La diputada de Ciudadanos, Mercedes Ventura, destaca que ha exigido al Consell abrir una investigación sobre lo ocurrido y pregunta «qué medidas piensa adoptar para certificar que se mantiene la objetividad y la transparencia en el proceso».