El president de la Generalitat, Ximo Puig, aseguró ayer que el Consell «no dará ni un paso atrás en su política lingüística», y defendió el decreto de plurilingüismo impulsado por el conseller de Educación, Vicent Marzà. Además, insistió Puig, «el objetivo es que los niños y niñas sepan bien castellano, valenciano e inglés».

Puig realizó estas declaraciones a los asistentes de la XXXII Trobada d’Escoles en Valencià, celebrada en la localidad valenciana de Guadassuar, cita a la que también asistió Vicent Marzà.

El máximo responsable del Gobierno autonómico aseguró que el conseller es interpelado a menudo «desde la mala fe» porque «a algunos dirigentes políticos les molesta que todos los niños valencianos tengan las mismas oportunidades y capacidad».

«Tenemos que seguir haciendo de la lengua un espacio de unidad, no de discriminación ni de soberbia por parte de nadie», valoró Puig, que también añadió que «los avances en materia lingüística se producirán atendiendo todas las sensibilidades y miradas». En este sentido, Puig se sirvió del filólogo Manuel Sanchís Guarner para asegurar que «la pluralidad es nuestra fuerza». El jefe del Consell agradeció a la comunidad educativa el esfuerzo por defender el valenciano.

DEFENSA DE DERECHOS // Por su parte, el responsable autonómico de Educación insistió en que «tenemos unos derechos que se tienen que respetar, por eso crearemos la oficina de derechos lingüísticos», una entidad cuya creación se anunció hace unos meses y que está previsto que funcione durante el presente ejercicio. Entre los objetivos, explicaron desde el Gobierno valenciano, «enmendar los hechos objeto de denuncia y ayudar a restablecer en la sociedad la normalidad de usos que le corresponden al valenciano como lengua oficial».

Asimismo, los responsables autonómicos adquirieron el compromiso de elaborar una memoria anual con las actuaciones y quejas atendidas. Marzà también dedicó unas palabras de gratitud «al trabajo a favor de la lengua realizado desde las bases durante muchos años de oscuridad».

Por otra parte, el president manifestó que el Consell acabará con los barracones y también que habrá una televisión y radio públicas y en valenciano.