La Diputación de Castellón anunció ayer una nueva rebaja en la tasa que cobra a los ayuntamientos de menos de 1.000 habitantes por gestionar los tributos que le convertirá en una de las primeras administraciones que reduce a un mínimo del 1% este impuesto. Tan solo el gobierno provincial de Almería ha tomado esta decisión antes que la castellonense.
El diputado de Hacienda, Salvador Aguilella, aseguró que el ejecutivo que preside Javier Moliner da «un paso más en la rebaja ya anunciada de un 20% de la tasa a todos los municipios y consorcios que tienen delegada la recaudación voluntaria de los principales tributos municipales».
Según el propio Aguilella, esta decisión beneficiará a 87 ayuntamientos, que se ahorrarán «270.000 euros que podrán invertir en servicios y mejoras para sus localidades». «Se trata de una prueba más de que la buena gestión económica de la administración redunda en más recursos para sus beneficiarios naturales», añadió el diputado.
La medida, que quedará formalizada en el pleno del mes de junio, «da respuesta a la inquietud transmitida por los alcaldes de los municipios más pequeños de contar con más recursos para hacer frente al funcionamiento diario», según Aguilella. «No hablamos de grandes cantidades, pero si un pueblo pequeño puede ahorrarse 4.000 euros en el pago de la tasa, es un recurso importante para su día a día», sentenció.
