El presidente de la Diputación, Javier Moliner, ha presentado esta mañana la estrategia que permitirá regular el uso de las 133.000 toneladas de biomasa agroforestal de la provincia, con el objetivo final de generar una nueva fuente de oportunidades para los pueblos de Castellón. “Hoy damos forma a una convicción que comparte todo el mundo rural, la de buscar el equilibrio entre la acción del ser humano y la sostenibilidad medio ambiental. Y este documento que os acabamos de presentar refleja en el papel lo que nuestros antepasados han hecho siempre, nutrirse del monte y el monte de ellos, pero adaptado a las exigencias e innovaciones de nuestra época”, ha señalado Moliner.

Esta hoja de ruta, elaborada por la empresa pública Vaersa en colaboración con los técnicos del área de Desarrollo Rural, coordinada por Domingo Giner, contempla, entre otros apartados, un completo diagnóstico de la oferta de biomasa que producen los montes de la provincia; un minucioso estudio sobre la demanda potencial de este combustible; y un programa de acción con 10 líneas concretas a desarrollar para impulsar este sector estratégico capaz de repercutir directamente en el desarrollo económico del territorio. Entre otras cifras, destacan las 300.000 hectáreas de masa forestal y arbórea de la provincia, que producen el 43% de la biomasa forestal de la Comunitat; o la estimación de la demanda en Castellón de este combustible en más de dos millones de toneladas, con gran protagonismo de la industria cerámica que abarca el 87% de dicha demanda. Hasta 58 ayuntamientos se han adherido ya a la propuesta.

El presidente provincial ha recordado que esta iniciativa se debe "al paso valiente dado por la conselleria de Medio Ambiente al contemplar en el Plan de Acción Territorial Forestal (Patfor), por primera vez, el aprovechamiento de masa agroforestal. Esta Diputación ha cogido el testigo y lo hemos personalizado a nuestra tierra, porque creemos en un futuro sostenible para Castellón a través de la gestión eficiente de nuestro entorno natural”. “La estrategia que acabamos de presentar plantea, desde la premisa de la sostenibilidad y la regulación, abordar el desarrollo económico. Nos ponemos a trabajar para concienciar a los ciudadanos, promover el cambio de calderas y aumentar la demanda de un combustible económico y limpio que nos regala el monte”, ha añadido Moliner.