Dos castellonenses se instalan cada día en el extranjero en busca de una estabilidad laboral.

Por su parte, los citricultores de Castellón se suman a la demanda de los empresarios para conseguir la declaración de zona catastrófica por los daños ocasionados en la clemenules por la lluvia.

Además, una niña de 15 años ha sido detenida en Benicarló por pegar a su madre.