El entorno de la plataforma marina del proyecto Castor registró ayer de nuevo un miniseísmo, de 1,5 grados en la escala Richter, mientras el ministro de Industria y Energía, José Manuel Soria, no tiene prisa en tomar la decisión sobre el futuro de la instalación.

En declaraciones a la prensa tras asistir en París a un encuentro con sus homólogos europeos, Soria destacó que lo que desea el Gobierno es que el estudio que están elaborando los expertos del Instituto Geológico Minero sea “lo más exhaustivo posible”.

De este informe depende la decisión del Gobierno “para reabrir” el almacén de gas “o bien para suspenderlo definitivamente”. Por ello, Soria pidió a los expertos que se tomen “el tiempo que consideren necesario, que recaben los asesoramientos externos que estimen oportunos” para después trasladar su postura al Ejecutivo estatal “para que pueda servir de base a la decisión”.

Y es que, una vez desestimado por el Tribunal Supremo el cierre de la instalación sin abonar una indemnización a la empresa promotora, al Gobierno se le ha abierto el dilema de clausurar una infraestructura de 1.700 millones sin que haya entrado en funcionamiento o bien tratar de que ofrezca un rendimiento al sistema gasístico. A este respecto, Soria señaló que, “cuando esté terminado” el informe, “tomaremos sus consideraciones” para decidir, “siempre con un criterio, y es, por encima de todo, la seguridad de las personas”.

Por otra parte, Les Corts debaten hoy una proposición del PP que pide “apoyo incondicional” al Gobierno para paralizar la instalación. Al tiempo exige que, en caso de comprobarse posibles negligencias en la tramitación del proyecto, exija y depure “todo tipo de responsabilidades”. H