La Conselleria de Sanidad ha decidido actuar para poner freno al turismo sanitario en la provincia de Castellón, ya que resulta poco rentable a las arcas autonómicas. Y es que con la llegada del verano aumenta el número de extranjeros y con ellos se dispara la factura sanitaria. Así, ya están instalados los terminales de cobro directo con tarjeta de crédito en los centros de salud de Benicàssim y Orpesa, los centros auxiliares de Alcossebre y Peñíscola, y también en las urgencias del Hospital General de Castellón y el Hospital Comarcal de Vinaròs.

Estos centros forman parte de un programa piloto de facturación y cobro de las prestaciones sanitarias a extranjeros que se encuentren temporalmente en la provincia y no tengan derecho a la cobertura sanitaria. En la Comunitat hay 24 puntos de cobro directo. Los turistas extranjeros que no dispongan de tarjeta sanitaria europea ni derecho a cobertura sanitaria por el Sistema Nacional de Salud (SNS) podrán abonar directamente el coste de la visita, así como recibir las facturas por estas atenciones.

PRUEBAS // En estos momentos, los técnicos ultiman la fase de pruebas de estos datáfonos para que estén operativos antes de que finalice este mes cara a la temporada veraniega, como han confirmado fuentes de la Conselleria de Sanidad. De este modo, Sanidad pone en marcha este plan tras tener constancia, como ya informó Mediterráneo, que solo logra recuperar la mitad de los más de cinco millones de euros que le cuesta cada año la asistencia sanitaria a turistas extranjeros. Los ingleses y alemanes son los que más hacen uso de la sanidad pública cuando visitan tierras castellonenses.

Del total del gasto sanitario en turistas, europeos en su mayoría, el montante más elevado se da en concepto de hospitalización, cirugía sin ingreso, urgencias y atención primaria. El problema que plantea esta asistencia es que primero se presta y luego se cobra, lo que provoca lagunas y números rojos, que se prevé evitar con esta medida.

De momento, la Conselleria de Sanidad desconoce cuánto dinero podrá ingresar con los datáfonos, aunque confía en que ayude a estabilizar la balanza de gastos e ingresos, que a día de hoy es totalmente deficitaria.

Con el cobro directo se evitan problemas a la hora de percibir la compensación, ya que en ocasiones un turista daba sus datos para que le fuera facturado a su país, pero luego no disponía de cobertura allí y esto planteaba un vacío que terminaba por sufragar la Comunitat. En este sentido, cabe remarcar que la mayoría de seguros privados ya ofrecen al cliente cobertura médica si viaja al extranjero en caso de no tener tarjeta sanitaria europea.