Convertida en vía verde en la actualidad, el antiguo trazado de la vía férrea de Ojos Negros, cuyo trazado circulaba por parte de la provincia de Castellón, todavía permanece en el recuerdo. A finales del siglo XIX se concedió la explotación de diversos yacimientos de hierro en la localidad turolense de Ojos Negros a un par de empresarios vascos, quienes fundaron la Compañía Minera de Sierra Menera el 3 de septiembre de 1900. Debido a la cantidad y calidad del mineral extraído deciden solicitar la licencia para la construcción de un ferrocarril económico de vía estrecha para transportar el mineral hasta el puerto de Sagunto.

El ferrocarril partía de la localidad de Ojos Negros, en la comarca del Jiloca, desde allí continuaba en dirección sureste atravesando el valle formado por la cuenca del río Jiloca hasta llegar a la ciudad de Teruel, para entrar en la sierra de Javalambre y penetrar en territorio de la Comunitat Valenciana, precisamente por la localidad castellonense de Barracas.

A partir de aquí atravesará las localidades de Caudiel, Jérica, Navajas, Segorbe y Soneja para entrar ya en la provincia de Valencia.

La decisión de construir esta línea ferroviaria, que estuvo en funcionamiento hasta el 29 de julio de 1972, se debió a las divergencias existentes con la Compañía del Ferrocarril Central de Aragón, y que cubría la actual línea entre Sagunto y Teruel, cruzando parte de la provincia de Castellón, y que discurre de manera casi paralela y en ocasiones a menos de cien metros de distancia. En el año 2001 el gobierno de la Generalitat Valenciana decidió acondicionar el antiguo trazado en vía verde. H