Si es uno de los 14.500 parados de Castellón que lleva más de dos años sin encontrar trabajo, está inscrito como demandante de empleo, ha agotado ya las prestaciones y tiene cargas familiares ahora cuenta con una nueva oportunidad de recibir una ayuda económica. El Gobierno acaba de anunciar que prorroga un año más el Programa de Activación para el Empleo (PAE), que contempla una ayuda de 426 euros al mes. Además se introducirán algunas modificaciones con el objetivo de ampliar el número total de beneficiarios.

Desde que puso en marcha, en enero del 2015, este plan que nació para intentar reinsertar a los parados de larga duración en el mercado laboral, ha beneficiado a 2.105 desempleados de Castellón, según datos de la Dirección Provincial del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) facilitados por la Subdelegación del Gobierno en Castellón. En total, se han recibido 2.206 solicitudes, de las que 801 han sido denegadas por no cumplir los requisitos. Otras 83 están pendientes de resolución. A nivel nacional se ha atendido a 217.721 personas.

El programa no solo implica una ayuda económica que dura seis meses. La ayuda está vinculada a un seguimiento personalizado para la reinserción laboral. De hecho, el solicitante no puede rechazar una oferta laboral adecuada a su perfil realizada desde los servicios públicos de empleo.

Las condiciones para poder participar en el Plan de Activación para el Empleo son muy concretas: haber trabajado alguna vez, haber estado inscrito en el desempleo a 1 de diciembre del 2014 o 1 de abril del 2016, llevar parado más de 360 días en los últimos 18 meses, tener responsabilidades familiares, no tener ingresos superiores a 484 euros mensuales y haber agotado hace más de seis meses la percepción de otros subsidios (Prodi, Prepara o la tercera Renta Activa de Inserción). Y ahí en donde los sindicatos han lanzado la voz de alerta. El propio secretario de Empleo de Estado, Juan Pablo Riesgo, reconoce que aunque el programa ha sido eficaz en términos de acceso al empleo, «no ha conseguido atender a todos los que inicialmente se había previsto», mientras que UGT y CCOO reclaman revisar los requisitos por entender que son tan exigentes que muchos de-sempleados quedan fuera.

Además de los beneficiarios de este programa, en Castellón hay 22.183 parados que perciben prestaciones. Solo en el mes de marzo, el número de solicitudes ascendió a 9.979, casi un 6% más que en marzo del 2016. Los gastos totales en prestaciones asciende a 17,6 millones al mes.