«En la vida había visto tanta gente como ahora». Es el testimonio de una vecina de Nules que ayer acudió por la tarde a las urgencias del centro de salud de su municipio, que estaban colapsadas de pacientes con síntomas gripales. «Llevo más de media hora esperando, aún tengo varias personas delante y no para de llegar gente», aseguraba a este diario desde el propio ambulatorio.

Colas como las de Nules se dan pese a que la tasa de gripe en la Comunitat en la primera semana de 2018 se redujo un 28% con respecto a la última del año pasado, al pasar de una incidencia de 200,1 a 143,8 casos por cada 100.000 habitantes. El virus está afectando sobre todo a menores de 14 años y el 94,74% de los casos estudiados corresponde a personas no vacunadas.

Pese a este descenso puntual, se prevé que la gripe repunte en próximas semanas, en especial debido al contagio que se puede producir en los colegios después del regreso de las vacaciones navideñas. Es por ello que pacientes, sindicatos y médicos reclamaron aumentar los refuerzos, pues consideran que los 26 profesionales que han llegado a hospitales y ambulatorios de Castellón en el marco del plan invernal son «insuficientes».