La Comisión Europea (CE) prevé, para conservar los caladeros del Mediterráneo, entre ellos los castellonenses, incluso vigilar la labor de los marineros con helicópteros y drones. Así lo han expuesto expertos del Gobierno comunitario en un encuentro con los medios, que se lleva a cabo estos días, y en el cual participa Mediterráneo. Esto sería, sobre todo, para controlar los descartes (que no se tire pescado por la borda), cuyo plan para el mar Mediterráneo entrará en vigor en 2017 y que en la práctica va a ser imposible de controlar por la Administración.

MULTINANUAL // Además, el próximo año, la Comisión Europea prevé aprobar un plan de gestión multianual para el Mediterráneo Oeste, sobre la pesca de ciertas especies. Aunque habrá medidas coercitivas, en principio no se apuesta por la prohibición total de pesquerías, sino más por “colaboración” con los marineros, según detalla el portavoz de la Comisión Europea para los Asuntos Marítimos y Pesqueros, Enrico Brivio. Entre las ayudas a la pesca local, la Comisión pretende facilitar la coordinación de los marineros. El objetivo es incrementar el precio de venta del pescado y para ello, tras agruparse en organizaciones de productores, los marineros podría vender directamente a las grandes cadenas de distribución; o subastarlo en la lonja, como ahora, pero no cada barca por separado, sino agrupadas, de forma que tengan más fuerza para imponer un precio.

Y es que desde la Comisión Europea se señala que la importancia de la pesca en el Mediterráneo no está tanto en la economía que genera por sí misma, sino en los empleos directos e indirectos que crea y en su importancia para mantener el territorio, pues más del 80% de las naves son artesanales (menores de 12 metros, según la definición de la CE). Esto es algo que va en la línea contraria a lo que realiza el Ministerio, que facilita la labor de las grandes empresas y dificulta la de los pescadores tradicionales, como puede verse con el reparto de cuotas de atún rojo, ya que el 80% va a una gran empresa de Tarragona, Balfegó, mientras las pequeñas barcas castellonenses y del Mediterráneo español quedan excluidas.

Entre las ayudas, el Ejecutivo europeo ha aprobado la paralización definitiva, pero solo serán posibles hasta el año que viene y aún no ha entrado en vigor el programa de este año. El secretario autonómico de Pesca, Francisco Rodríguez, señaló en Les Corts que es algo “fundamental” pero aún “se está abordando”. De ello se hablará hoy en la reunión interministerial, en Bruselas, dirigida a cómo recuperar los caladeros del Mediterráneo. H