Un seísmo de consecuencias imprevisibles ha sacudido al PPCV en la primera semana del juicio del caso Gürtel. Las confesiones de su cabecilla, Francisco Correa, y de sus socios y acusados, Álvaro Pérez El Bigotes y Pablo Crespo, sitúan a Francisco Camps en el centro de la financiación irregular del partido en su etapa como presidente y señalan también a Ricardo Costa y a Juan Cotino. El juicio se reanuda el miércoles y aún tiene recorrido con las declaraciones del propio Costa, que amenaza con tirar de la manta, y de Vicente Rambla.

Jornada 1: Para Costa y Rambla los delitos están prescritos

El juicio arrancó con las cuestiones previas, tan farragosas que el juez que instruye el caso, José María Vázquez Honrubia, lamentó que las defensas las expusieran «una y otra vez». Durante la vista, los abogados de los castellonenses Ricardo Costa, exsecretario general del PPCV; y Vicente Rambla, expresidente del Consell, pidieron la absolución de sus clientes al considerar que los delitos que se les atribuye --la presunta financiación irregular del PPCV durante las campañas electorales de 2007 y 2008-- ya han prescrito. Además, la fiscala Anticorrupción, Miriam Segura, mostró su disposición a reducir la pena para el cabecilla de la trama, Francisco Correa, si este seguía colaborando con la justicia. Segura hizo extensible la rebaja en las condenas a los nueve empresarios que en febrero, y a cambio de eludir la prisión, suscribieron un documento en el que reconocían la financiación ilegal del PP.

Jornada 2: Correa señala a Costa como eje de la trama

La segunda jornada fue el momento Correa. El responsable de la trama Gürtel, que en uno de los momentos curiosos del día dijo que le ponía «nervioso» ese nombre en alemán, situó a Ricardo Costa como el eje de la presunta financiación irregular del PP. En su declaración, colaboró en todo momento con la fiscala Anticorrupción y afirmó que el exsecretario general del PPCV obligó a sus sociedades a facturar de forma irregular trabajos de las campañas electorales de 2007 y 2008 a otras empresas si querían cobrar. «El PP tuvo la iniciativa: ‘Si queréis cobrar tenéis que hacerlo de estos empresarios’. Imagino que a ellos también les dirían que si no lo hacían así tendrían menos adjudicaciones», explicó. Durante la vista, los nueve empresarios acusados confesaron que pagaron algo más de 1,2 millones de euros al PPCV. Todos ellos reconocieron que asumieron como propios gastos del partido, que este no declaró para no incumplir la ley.

Jornada 3: Crespo y 'El Bigotes' quieren tirar de la manta

La vista del miércoles en la sede de la Audiencia en San Fernando de Henares (Madrid) comenzó con retraso y fue muy corta. ¿El motivo? Que los otros dos presuntos responsables de la trama, Álvaro Pérez El Bigotes y Pablo Cresco, anunciaron, en un nuevo e inesperado giro de los acontecimientos, que pretendían hacer como su cabecilla, Francisco Correa, y tirar de la manta. Para ello, pidieron al juez Vázquez Honrubia el aplazamiento del juicio hasta el viernes, para que sus defensas tuvieran tiempo de preparar con ellos una nueva estrategia. Fue el abogado de Crespo, Miguel Durán, quien hizo la petición al magistrado, y este le preguntó si su cliente aportaría «elementos o hechos relevantes a la luz de lo que dijo Correa», a lo que el propio Durán respondió que así sería. Por su parte, Ricardo Costa también afirmó que se planteaba hacer «revelaciones» tras ser señalado por Correa como el centro de la presunta financiación.

Jornada 4: sitúan a Camps como la 'X' de la Gürtel

Y tiraron de la manta, provocando el seísmo. Álvaro Pérez El Bigotes y Pablo Crespo señalaron al expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, como el creador del sistema de financiación irregular del PP valenciano. Pérez, que en su día llamaba «amiguito del alma» a Camps, dijo que el dirigente era «el único que podía hacerlo». Pero el de Camps, que negó cualquier implicación posteriormente, no fue el único nombre que apareció en la sala. Volvió a salir el de Ricardo Costa --esta vez como receptor de las órdenes de Camps--, así como el del expresidente de Les Corts, Juan Cotino y el que fuera vicepresidente del Consell, Vicente Rambla. Asimismo, Pérez señaló al también exvicepresidente del Consell, Víctor Campos y a la exsecretaria general del PPCV, Adela Pedrosa; y Crespo hizo lo propio con el expresidente de la Generalitat, Alberto Fabra. En sendos comunicados, estos dos últimos negaron saber nada de contratos irregulares.