Los técnicos han iniciado esta semana la instalación del nuevo acelerador lineal del Hospital Provincial, un equipo de última tecnología que ha supuesto para la Conselleria de Sanidad una inversión total de 3,1 millones de euros y cuya ubicación se halla en una estructura de hormigón armado con muros de más de un metro de espesor, al que se accede a través de un laberinto para extremar las medidas de seguridad para evitar las fugas de radiación.
El nuevo acelerador, denominado Versa HD, ha sido diseñado para mejorar la atención al paciente y tratar un espectro más amplio de tumores incorporando nuevas técnicas al arsenal terapéutico del hospital como la radioterapia estereotáxica cerebral fraccionada y la radiocirugía. A través de ellas se podrá tratar tumores cerebrales y metástasis cerebrales no susceptibles de cirugía, con lo que se reducirá el número de pacientes que tendrán que derivarse a Valencia para este tipo de tratamientos.
El director del Instituto Oncológico, Carlos Ferrer, explica que este nuevo acelerador se caracteriza por modelar el haz de radiación y la forma del tumor con gran precisión. Además, ofrece nuevas capacidades que no solo aumentan las posibilidades terapéuticas sino que también incorpora la dosimetría portal (es el segundo equipo en España de estas características) lo que representa una mejora adicional en la seguridad de este tipo de tratamientos, pues permite medir en tiempo real que la dosis de radiación administrada se cumple con la máxima precisión.
Este equipo, además, permitirá realizar un mayor número de tratamientos de radiocirugía extracraneal, que hasta ahora estaban limitados al disponer únicamente de un equipo dotado de esta capacidad. Estos tratamientos cada vez tienen más indicaciones en tumores primarios de pulmón o metástasis hepáticas o ganglionares, puntualiza el doctor Ferrer.
La primera fase del montaje del acelerador finalizará la próxima semana. A continuación vendrá una segunda etapa que consistirá en el montaje de la parte generadora de radiación. Para ello, es necesario el permiso del Ministerio de Industria tras un informe del Consejo de Seguridad Nuclear. Después viene el proceso en el que los especialistas de Radiofísica comienzan la calibración y preparación del equipo, que podrá tratar ya a pacientes en primavera.
