El Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) ha recogido esta semana las dificultades por las que atraviesan dos concesionarios de vehículos de la provincia de Castellón. De un lado, Imola SA, que ha entrado en fase de liquidación, después de que el juez del juzgado número 1 de lo Mercantil de Castellón decretara el auto de apertura el pasado 15 de mayo del 2014. De otro lado, el Borme también se hace eco del “cese de las limitaciones de las facultades de administración” de Automoción Cano, según auto del juzgado de lo Mercantil número 2 de Valencia, por lo que devuelve su gestión a la propiedad. H