La lluvia regresó de nuevo ayer a la provincia de Castellón, con una intensa aunque breve tormenta que dejó débiles precipitaciones de granizo en Fredes. Además, las precipitaciones, que dejaron un máximo de 6,8 l/m2 hasta las 19.00 horas, estuvieron acompañadas de viento, que sopló con más fuerza en el norte y en el interior de la provincia, alcanzando los 80 km/h en Vilafranca.

Los chubascos tormentosos se iniciaron por la tarde, y pocos minutos después, sobre las 19.00 horas, el impacto de un rayo incendió una zona forestal de carrascal en la localidad de Azuébar. Afortunadamente, la lluvia facilitó la extinción del fuego originado, y a la llegada de los bomberos ya estaba prácticamente apagado.

La Conselleria de Gobernación y Justicia, a través del Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), decretó la preemergencia en el interior norte de Castellón. Y es que hoy se prevé que las rachas lleguen a alcanzar los 90 km/h en zonas del interior, y hasta 70 km/h en el resto de municipios. Es por ello que en localidades como Ares del Maestrat, Castellfort, Forcall, Morella o Vilafranca ya se ha activado la alerta naranja, y los organismos de emergencias y servicios públicos están preparados para adoptar medidas preventivas. Hoy, el cielo estará poco nuboso y el termómetro no experimentará cambios notables. H