Los nuevos conductores son cada ves menos noveles. La crisis ha retrasado en cinco años la media de edad para sacarse el carnet, y en Castellón en pocos años ha `pasado de los 18 a los 23. “Los castellonenses ya no se sacan el carnet para ir a estudiar a la universidad, ahora lo hacen cuando les hace falta el vehículo para ir a trabajar”, asegura Jaime Amorós, presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas.

Aumenta la edad y también el porcentaje de castellonenses que superan con éxito los exámenes de circulación pese a que desde las autoescuelas apuntan a que sus alumnos ahora realizan muchas menos prácticas. Un 56% de los aspirantes a conductores pasaron los test prácticos en 2008 mientras que este año han sido un 60,8%, un incremento en puntos porcentuales pero no en pruebas realizadas, pues Tráfico elaboró en Castellón 19.543 exámenes prácticos antes de la crisis por solo 12.592 en el año 2012, lo que se entiende como una caída del 35% en cinco temporadas.

Los datos son contradictorios pues si los aspirantes a conductores realizan menos prácticas de automóvil lo normal sería que los porcentajes de aprobados disminuyeran, pero resulta totalmente lo contrario. Y Amorós apunta a la edad de los examinados como el principal factor para que se produzca este fenómeno.

Prepararse para lograr el carnet de conducir a la primera con 20 prácticas cuesta una media de 739,38 euros, según el último estudio realizado por FACUA-Consumidores en Acción. La situación económica de las familias no pasa por el mejor momento y muchos retrasan al máximo el obligado desembolso por el B1 (la licencia para llevar turismos).

MÁS ESFUERZO PARA NO GASTAR // Disponer de tres oportunidades para conseguir la licencia de conducción cuesta 88,50 euros por lo que los alumnos se esfuerzan en aprobar a la primera pese a acudir menos a las autoescuelas. La tendencia de presentarse más tarde a la prueba hace que los castellonenses necesiten menos clases prácticas para aprobar pues han tenido más tiempo para coquetear al volante a modo de ejercicios libres, según la asociación provincial, además suelen ser personas más maduras con una necesidad del permiso.

Desde la Jefatura Provincial de Tráfico indican que esta mejora porcentual está ligada a la mejor preparación de los alumnos, tanto por el trabajo de estos al tomarse más “en serio” la obtención del permiso por la necesidad de no pagar en demasía, como a la mayor dedicación de los profesores, pues el cambio de normativa de principios de este mismo año les otorga más protagonismo.

En lo referido a los exámenes teóricos se está utilizando una base de más de 15.000 preguntas que permiten que cada alumno tenga una combinación aleatoria de las mismas. Este cambio potencia la figura del docente de la autoescuela que deberá formar al alumno para que sea capaz de dar la respuesta correcta de forma razonada. Con anterioridad había un número limitado de test que en ocasiones permitía a algunos alumnos memorizar todas las respuestas correctas sin comprender el sentido de las mismas, apuntan desde Tráfico.

TAMBIÉN EN EL TEÓRICO // En este sentido, el porcentaje de aprobados en el examen teórico también es ahora superior, 70%, al de 2008, en el que pasaban la prueba el 64% de los candidatos. Los datos reflejan que pese a que el test es ahora más complicado los castellonenses mejoran. En esta parte de la certificación para llevar vehículos, las cifras de examinados también ha bajado, de 13.968 a 9.102 en cinco años. H