Un ciudadano que decida realizarse una prueba de esfuerzo en la unidad de medicina deportiva del Hospital Provincial de Castellón tendrá que estar más de un año en lista de espera. Y es que las citas ya se dan para noviembre del 2018, según ha comprobado Mediterráneo. Por su parte, el representante de CCOO en el centro, Amalio Palacios, asegura que los problemas se acrecentaron con el despido de 17 trabajadores en octubre del 2016, puesto que entre los afectados había un médico deportivo. Desde entonces, la unidad solo realiza tests a deportistas en horario matinal, con lo que el número de pruebas diarias se reduce a la mitad. «La situación se ha agravado mucho en los últimos meses», sostiene Palacios, quien añade que son exámenes «muy completos y, por lo tanto, largos», con lo que cada jornada no se hacen más de cinco.
También el responsable de Sanidad del sindicato CSI.F, Vicente Navarro, critica que los «recortes» en el Provincial hayan perjudicado a los pacientes de una unidad que «tenía mucho prestigio entre los deportistas» y «da muchos ingresos, puesto que todos los usuarios que acuden abonan el coste que tiene el examen médico».
Y es que el Hospital Provincial cuenta con la única unidad de medicina deportiva pública del territorio castellonense. El General y la Plana tan solo realizan este tipo de tests a pacientes que presentan patologías cardiovasculares, y solo cuando lo determinan los facultativos que los atienden. Este diario comprobó que el tiempo de espera en el centro vila-realense está alrededor de los cinco meses, aunque fuentes del mismo matizaron que depende de la gravedad de la enfermedad.
A LA PRIVADA // Esta situación, denuncian los representantes sindicales, no solo está colapsando el servicio, sino motivando que muchos usuarios opten por acudir a las clínicas privadas. Y es que al aumento de las listas de espera se suma el incremento en el precio del servicio, que en octubre del 2016 pasó de 40 a 90 euros pese a las críticas de los sindicatos y de la Diputación provincial.
