Los centros de empleo para discapacitados de Castellón apelarán al Defensor del Pueblo de la Unión Europea si en breve no han cobrado la deuda del Servef, que les ha colocado en una situación “límite”. El portavoz de la federación que aglutina a los colectivos, Juan José Serrano, explicó ayer viernes que “la situación es insostenible, y llevaremos los impagos donde haga falta, primero, al Síndic de Greuges y a la Defensora del Pueblo, pero llegaremos hasta Europa si hace falta, pues de ahí procede el 50% de la financiación, que el Gobierno central ya ha trasferido a la Generalitat, pero aquí no ha llegado”.

Los centros critican que el Servef les debe aún todo el dinero del 2012 y aboca a algunos al cierre, al no poder atender las nóminas de los 200 trabajadores con discapacidad que atienden.

DEMANDA LABORAL // Serrano apunta a que la demanda laboral ha ido aumentando en los últimos cinco años, y se necesitarían “hasta cinco centros más”. La explicación está en que “antes, muchas empresas absorbían un amplio cupo de estos trabajadores, que son los primeros que después se han quedado en paro con la crisis y la caída del mercado laboral”. “Ahora, esa demanda se ha trasladado a los centros especiales de empleo, que ya están al tope, y ahogados por la deuda”.

El presidente de Cocemfe, Carlos Laguna, sostiene, por su parte, que “hay que buscar sectores al alza de demanda de este tipo de mano de obra, como la que ya está activa en Castellón”. H