La confirmación de que el Ayuntamiento de Castellón extremará la lucha contra el ruido nocturno en la zona de Lagasca mediante su declaración como zona acústicamente saturada (ZAS) no alterará la rutina festiva de los usuarios de los respectivos locales de ocio y restauración durante la semana de las fiestas de la Magdalena. El consistorio aún debe tramitar las medidas de lucha contra el ruido en esta zona, que entrarán en vigor en torno al próximo verano.

En las tascas, pese a que las recientes mediciones sonométricas confirman la prórroga de la ZAS durante dos años más, también se podrá consumir bebida en la calle gracias al recurso interpuesto el pasado septiembre por el Ayuntamiento ante el Tribunal Supremo contra la anulación del artículo de la ordenanza municipal de convivencia ciudadana que permitía beber de forma excepcional en las calles Barracas e Isaac Peral, las de las tascas.

Un panorama más flexible se otea en la céntrica zona de ocio de Tenerías. Los test sonométricos arrojaron valores inferiores a 65 decibelios nocturnos, por lo que se mantiene la vigencia del plan de acción zonal (PAZ), con medidas mucho menos restrictivas que las previstas en la ZAS. Por tanto, nada cambiará durante la semana de Magdalena.