La cruzada judicial de la Asociación Castelló Sense Soroll para liquidar el ocio nocturno en la capital no alcanzará a los negocios hosteleros de la calle Tenerías y su entorno. Al menos de momento. Las mediciones sonométricas que encargó el Ayuntamiento por orden del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) concluyen que los niveles de ruido nocturno son inferiores al tope de 65 decibelios que hubieran dado lugar a la declaración de Tenerías como Zona Acústicamente Saturada (ZAS).

Según el informe municipal al que ha tenido acceso Mediterráneo, los tres micrófonos instalados en las calles Tenerías y Torreblanca entre el 11 de octubre y el 12 de noviembre --cuando se hicieron las mediciones-- arrojan promedios de entre 55,8 y 62 decibelios. Los tres micrófonos no superaron el tope de 65 decibelios dos veces por semana durante las tres semanas alternas en las que se realizaron las mediciones. En concreto, los medidores de ruido se instalaron frente a los pubs Kche y Sixel, ambos en la calle Tenerías, y en el exterior del Pub Particular Music Club, en la calle Torreblanca.

Por tanto, según refleja el informe, el consistorio podrá mantener ese enclave de la capital como zona PAZ, cuyas medidas de control del ruido nocturno son más laxas que la ZAS.

El TSJCV ordenó las mediciones el pasado mes de octubre al estimar parcialmente un recurso de Castelló Sense Soroll contra las mediciones de ruido que ya efectuó el Ayuntamiento en la zona en marzo del 2010.

TEST EN LAS TASCAS // Como ya informó este periódico la semana pasada, las últimas mediciones realizadas en la zona de las tascas han constatado que los toldos antirruido han rebajado entre 5 y 6,5 decibelios de media los niveles de ruido nocturno en las calles Isaac Peral y Barracas. De los 85 decibelios que dieron pie a la ZAS se ha pasado a entre 78,5 y 80 decibelios de media. Niveles insuficientes dado que el tope máximo para retirar las medidas correctoras de la ZAS es también de 65 decibelios. H