La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, se pronunció ayer respecto a la polémica por la plaza de director de la Banda Municipal de Música de Castellón, asegurando que su convocatoria se abordará en la junta de gobierno local, donde decidirán lo que tengan «que decidir». «Ahora estamos con la relación de puestos de trabajo (RPT), por lo tanto será en este contexto en el que la pondremos encima de la mesa». «Lo que va a hacer el equipo de gobierno es lo mejor para la banda, para que siga con su prestigio nacional y, si podemos, internacional, y siga siendo querida por la ciudadanía», insistió Marco.

No clarificó, sin embargo, si se respetarán las bases publicadas en junio del 2015 específicas para el puesto de director o se modificará la convocatoria.

EL ESCRITO // La primera edila remitió el asunto a la junta de gobierno un día después de que Mediterráneo se hiciera eco de la brecha abierta en el seno de la banda a raíz de este puesto de trabajo. La mayoría de los músicos que la componen (31 de 49) firman un escrito --registrado en el ayuntamiento el día 16-- en el que piden «que se respete la relación de puestos de trabajo como está» y se clarifique si está previsto cambiar la naturaleza de la plaza y las condiciones de contratación. Y es que, en el mismo documento, manifiestan que «un grupo reducido de integrantes de la banda, que presume de su relación con la concejala de Cultura, Verònica Ruiz, dice que en sus encuentros ha informado de su intención de modificar la plaza».

Un extremo, el de su relación personal con algunos músicos, que desmintió Ruiz, insistiendo en que su intención es «sacar cuanto antes la plaza, porque el actual director está en comisión de servicios». El principal afectado, José Vicente Ramón, manteniéndose al margen de la polémica, no desmintió el escrito.