El conseller de Educación, Vicent Marzà, señaló que prevé reunirse con el rector de la UJI, Vicent Climent, «en enero», junto a los rectores de las otras cuatro universidades públicas valencianas, para «revisar y redefinir el criterio de reparto de la financiación, que se marcó hace ya mucho tiempo, y hay que solucionar».
«Desde el primer momento estamos cumpliendo con la UJI, y ya aportamos 18 millones en el 2016 y el 2017 para las obras de Medicina que les debía el anterior gobierno, y, si no calcularon bien, que lo digan y nos sentaremos para buscar una solución», señaló Marzà en su visita a Castellón. Tras remarcar el «esfuerzo económico» que se ha hecho desde el 2015 para devolver a las universidades lo que dejó pendiente el PP y también la deuda histórica, Marzà especificó que «este dinero debe destinarse, según el convenio, a gasto corriente, y no a infraestructuras, porque después deberá rendir cuentas a la Conselleria de Hacienda». Y reiteró que «para el 2018 se prevé una nueva partida de 6 millones» tras abonar además créditos pendientes por valor de 26 millones, «para evitar que sigan asumiendo deudas del pasado». «Estamos cumpliendo y seguiremos cumpliendo» en el pago de la deuda histórica, aseguró el conseller.
MEJORAS // Marzà supeditó de nuevo la mejora de la subvención a la UJI y a las universidades a la del sistema autonómico. «Tendríamos 300 millones más para Educación, y, por tanto, para las universidades», dijo. Y explicó que la infrafinanciación de 1.500 euros menos por alumnos a la UJI que la media valenciana le viene porque «tiene una visión más de servicio público y docencia, y menos en I+D+i que, por ejemplo, la Politècnica de València».
